No es un secreto que la taza de población del planeta aumenta exponencialmente con el pasar de las décadas, lo cual implica retos como el uso de recursos naturales, la disposición de los desechos e inclusive la tasa de ocupación laboral.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) realizó una investigación en la cual indica diferentes aspectos sobre el trabajo del futuro, entre los cuales hablaba de la evolución laboral, en la cual una de sus características más relevantes es la desaparición de los espacios físicos de trabajo.
En un mundo donde la tecnología ha facilitado el plano de las telecomunicaciones, muchas de las tareas laborales cotidianas ya se pueden hacer desde cualquier lugar del mundo, porque todo queda al alcance de una conexión a internet, reuniones, informes, documentos colaborativos y planeaciones estratégicas, ya no requieren recursos físicos y pueden ser manejadas desde las herramientas digitales.
Y esta revolución, que algunos comparan, guardadas sus proporciones, con la revolución industrial, trae consigo retos importantes para las organizaciones, como por ejemplo estructurar el trabajo por proyectos y no por horarios laborales, porque las personas quieren ser dueñas de su tiempo y elijen cómo organizar sus actividades para cumplir con su deber.
Esta evolución de las metodologías de trabajo, implica diferentes retos, como mantener actualizados a los empleados en sus diferentes áreas de conocimiento y actualizarlos en los avances que van teniendo las diferentes industrias en las cuales se desenvuelven.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta revolución digital no sucede solamente por el ahorro que se da al no tener espacios físicos o lo conveniente de poder conformar equipos de trabajo multidisciplinarios sin que la distancia sea un obstáculo, sino que existe, porque las nuevas generaciones cada vez exigen un mayor dominio de su tiempo, no quieren sentirse esclavos, no quieren centrarse en actividades rutinarias y necesitan tener a la vista los logros conseguidos por el éxito de sus proyectos.
Entonces el mayor reto de las empresas de hoy es aprovechar todas las herramientas que entrega el mundo digital y migrar sus compañías a la nueva revolución, teniendo en cuenta su alcance, pero con la determinación de conquistar este nuevo mundo que se presenta.